Carlos Corpas

Debido a su corta edad y a los problemas para poder torear en España sus primeros pasos taurinos junto a su hermano se produjeron siendo anunciados como niños toreros en tierras francesas formando parte de diversos espectáculos y simulando la muerte de un novillo.

Carlos y Paco junto a Mario Carrión y con la rejoneadora Beatriz Santullana por delante debutaron en la plaza francesa de Cannet obteniendo un gran éxito aquella tarde que paso a la historia por el brindis de uno de sus novillos al pintor Pablo Picasso, quien les correspondió el detalle.

Destacó tanto en esta suerte que en su presentación como novillero en Madrid el 12 de julio de 1953 y con un novillo llamado Florido perteneciente a la ganadería de Frías, fue obligado por el público a dar la vuelta al ruedo tras la citada suerte.

Confirmó la alternativa el 1 de mayo del año siguiente en Las Ventas en Madrid, donde el torero gaditano Rafael Ortega Domínguez, le cedió los trastos en presencia del testigo sevillano Juan Barranco Posada, para dar lidia y muerte a Carderillo perteneciente al hierro de Castillo de Higares.

No exento de percances (contaba con 13 cornadas en su haber) y teniendo una irregular carrera, decidió retirarse en el año 1960, habiendo contraído matrimonio en fechas anteriores al hecho.