En 1959 se establece como productor independiente donde le siguieron importantes cintas como Las aventuras del Capitán Piluso (En el castillo del terror), La chica de a bordo y Rolando Rivas, taxista, por nombrar algunos.
Todas ellas creadas por su propia productora que llevaba su nombre.
Definido por muchos como un hombre gentil, de muy buen humor y sobre todo audaz, se atrevió a producir El día que me quieras de 1969, inspirada en Carlos Gardel, fallecido trágicamente un accidente aéreo.
[2] En 1971 hizo una generosa donación a Acopecine que le permitió iniciar actividades y contar con fondos para operar sus cintas.
[3] Trabajó tanto en Argentina como en México donde encontró al cantante Leo Dan en la década de 1970.