Carlos López Degregori

Pasó sus primeros años en Collique, que en aquel entonces era una zona agrícola no urbana, ya que su padre era tisiólogo y director del sanatorio de Collique; en esos años, esa institución trataba enfermos de tuberculosis.

En 1970, ingresó a San Marcos con la idea de cursar Medicina, pero en Estudios Generales se inclinó por la literatura que había sido su interés desde niño.

En 1978, a su regreso al Perú, integró el grupo La Sagrada Familia del cual se separó muy pronto para iniciar su propio camino poético.

Casualmente, su primer libro, Un buen día, apareció publicado bajo el sello de La Sagrada Familia.

Desde entonces, obras como Una casa en la sombra, Aquí descansa nadie, Flama y respiración entre otras, muestran una poética considerada por la crítica especializada como "una empresa radicalmente original en nuestra poesía"[1]​ (Américo Ferrari) o "un universo cerrado y autosuficiente que cuenta con sus propios paisajes, sus propios climas y sus propios personajes"[2]​ (Eduardo Chirinos).