En Lima compró varios impresos que remitía a Guayaquil en baúles y cajones.
En 1901 se matricula en la Escuela de Química y Farmacia en Quito.
En 1906 viaja a Lima donde cursó Química y Farmacia en la Universidad de San Marcos.
En 1913 preside el comité obrero, solicitando al presidente Leonidas Plaza que el 1 de mayo sea declarado día festivo dedicado a los trabajadores.
A sus ochenta y tantos años vivía en una pequeña villa de cemento de su propiedad ubicada en las calles Padre Solano y Riobamba.
[2] Su biblioteca pasó a manos del Cabildo por lo cual en su honor mantiene su nombre.