Carlota de Francia

Por su vestimenta y joyas en los retratos existentes, se puede apreciar su alto estatus social.

Su rosario también presente en la pinturas, indica que ella era una católica devota.

Las familias reales europeas comisionaron retratos de sus hijos para registrar su desarrollo y, a menudo, intercambiaron estas imágenes con otras casas reales como un gesto diplomático.

Su padre inmediatamente pidió a Jean Clouet que pintara un retrato de la nueva delfina.

La única persona que veló por ella cuando estaba enferma fue su tía, Margarita de Amgulema.

Familia real: Carlota esta al frente, a la izquierda. Libro de horas de Catalina de Médicis.