Carolina de Gran Bretaña

[3]​ En 1722, por deseo de su madre, se le administró la variolización, un precoz tipo de inmunización contra la viruela popularizado por lady Mary Montagu y el médico Charles Maitland.

[6]​ Según el escritor John Doran, «Carolina Isabel, la amante de la verdad, gozaba del amor sin reservas de sus padres, y merecía este afecto, devuelto con un vehemente apego.

Según la creencia popular, la infelicidad de Carolina se debía a su amor por un cortesano casado, el barón John Hervey.

Cuando Hervey murió en 1743, Carolina se retiró al palacio de St.

Su bondad fue constante y uniforme, su generosidad inmensa, sus caridades extensas; en resumen, yo, que no soy monárquico, podría ser pródigo en sus alabanzas».

Lord Hervey