Casa Mira es una pastelería fundada en 1842 en el n.º 30 de la Carrera de San Jerónimo de Madrid,[1] próxima a la Puerta del Sol, famosa por la elaboración y venta de turrón y mazapán artesanales y otros dulces navideños y peladillas.
[2] Es contemporánea de históricos locales madrileños como la “La Fontana de Oro” o la “pastelería Lhardy”, en esa misma calle.
[4][b] También ha sido reconocida su labor por el Ayuntamiento de Madrid, como avisa la placa colocada por el Concejo en la fachada.
El local, se inicia con la tienda, espacio cuadrangular de tamaño mediano, con techo de escayola y artesonados con motivos florales, paredes revestidas de caoba y espejos, mostradores de cristal, y el retrato del fundador y un escudo policromado en madera con la leyenda “Proveedor de la Real Casa”.
[c] En la trastienda se encuentran las cocinas y el despacho del director en el que continúan colgados en la pared un conjunto abigarrado de diplomas, distinciones y halagos.