La Casa de Wessex (también llamada Casa de Cerdic) está conformada por los monarcas ingleses que gobernaron Wessex y, desde el 927, toda Inglaterra.
La dinastía inició con Cerdic de Wessex en el 519 y se mantuvo en el poder hasta la conquista normanda de 1066, aunque el linaje fue restablecido poco después por Enrique II, quien la unió a la Casa de Plantagenet (lo que convierte a Cerdic en el ancestro de la actual familia real británica).
Alfredo el Grande (r. 871–899) es comúnmente considerado como el primer monarca inglés, pues durante su gobierno dominó al Reino de Mercia y se autoproclamó Rey de los anglosajones tras liberar Londres de los daneses en 886.
Solo unas décadas después, en el 927, su nieto Athelstan establecería el Reino de Inglaterra.
Los reyes de Wessex aparecen con un sombrado violáceo; los reyes de otros reinos no tienen fondo; las cajas con líneas gruesas representan un parentesco cercano (padres, esposos e hijos) y las finas representan un parentesco más lejano.