La formalización del edificio responde al uso para el que fue concebido: Templete para tocar las chirimías y trompetas.
Desafortunadas intervenciones hicieron que perdiese su carácter exento al adosársele una edificación a su frente oeste.
La tercera fachada exenta es la situada en el lado norte, de cara al río Darro y a la Alhambra.
La fachada más occidental es la que actualmente cumple funciones de medianera.
La fachada principal se resuelve mediante huecos regulares simétricamente dispuestos.