Está situado a la orilla de la carretera NA-122, a 3 km de Estella, a las faldas de Montejurra, en una ubicación estratégica.
El topónimo es de origen vasco y significa ‘casa(s) nueva(s)’, de etxe- ‘casa’ y -berri ‘nuevo’.
[5] La elección de su emplazamiento, al igual que ocurre con el vecino de Aberin, obedeció, sin duda, a su privilegiada situación respecto a la intersección entre el corredor natural Pamplona-Logroño, sobre el cual discurre igualmente el Camino de Santiago francés, con la vía que desde Estella accede a la Ribera estellesa, vía que, al mismo tiempo, servía de cañada agropecuaria.
El acceso, además, a las vegas del río Ega era otro elemento determinante.
En 1847 se consideraba despoblado «propiedad de los sanjuanistas».