Casimir Monier fue un empresario, editor y librero francés, que desarrolló gran parte de su vida en España entre las décadas de 1820 y 1870.
[1] Fue inmortalizado por su compatriota Dumas, admirado por el cronista de la Villa de Madrid Mesonero Romanos en sus memorias madrileñas y mencionado en diversas ocasiones por Benito Pérez Galdós, tanto en sus novelas como en algunos de sus Episodios Nacionales.
[4] También los menciona Pascual Madoz en su Diccionario, con una descripción que merece la pena reproducir: A pesar de la publicidad y una cierta popularidad que recogen otras fuentes contemporáneas, tanto periodísticas como literarias, el Hotel de Monier no duró más de quince años.
Es poco probable que Casimir Monier llegase a imaginar que llegaría a convertirse en un personaje de Dumas, y para mayor mérito, en el personaje de sí mismo.
El atribulado posadero encontró acomodo para todos, les proporcionó un buen baño, y al día siguiente les envió a cenar al vecino restaurante que otro hábil empresario francés había montado en la carrera de San Jerónimo, el mítico Emilio Huguenin Lhardy.