Manchinha era una perra hembra sin raza definida, bautizada por un empleado del supermercado Carrefour, en el municipio de Osasco, donde vivía en el estacionamiento.
[3] Según se informa, el empleado cumplió la orden dándole a Manchinha mortadela que contenía veneno para ratas y luego golpeándola con una barra de aluminio.
[1][4] Pasaron tres días antes de que el caso fuera denunciado a las autoridades.
[7] Varias celebridades, entre ellas Tatá Werneck y Luciano Huck, hicieron declaraciones reaccionando al caso.
Luisa Mell, actriz y activista por los derechos de los animales, se pronunció contra Carrefour.