El gobierno de Santos en varias ocasiones manifestó su rechazo a la actuación del general en su momento.
[6][7] Sin embargo, políticos afines a Uribe, negaron que tuviera conocimiento de la actuación del oficial e hicieron énfasis en el supuesto peligro que él habría corrido teniendo a un oficial corrupto al mando de su seguridad.
[12][13][14] Santoyo argumentó que su jurisdicción de comandante no daba para tales alcances, motivo por el cual, la Fiscalía - a cargo de Camilo Osorio - dándole la razón, le absuelve,[15] y en consecuencia el sindicado resuelve demandar a la procuraduría.
[18] Tras su reintegro y posterior ascenso, Santoyo pasó a ser agregado de la policía a la embajada de Colombia en Italia[19] hasta 2009, pues en ese año pidió la baja voluntaria del servicio activo.
Funcionarios y exfuncionarios públicos manifestaron su opinión, algunas en apoyo a Uribe (pues debido a la confesión de su exjefe de seguridad quedó demostrado sus vínculos con el narcoparamilitarismo) y otros que acusan al expresidente.