El castillo fue construido durante el siglo XV, siendo posteriormente reformado en el XVI.
Fue un enclave estratégico en el siglo XVII durante la guerra con Portugal en el transcurso de la cual quedó parcialmente destruido.
A partir del siglo XVIII llegó su progresiva decadencia que lo llevaron a un estado de ruina por su lamentable estado de conservación.
En 2005 las autoridades locales, en cuyas manos recae la propiedad del mismo, invirtieron cerca de 80.000 euros en su consolidación y restauración.
Hoy aún se pueden apreciar dos torres y parte de la muralla de lo que fue el conjunto original.