El castillo del siglo XII fue trabajo de la familia Coëtmen-Penthièvre.
Fue parcialmente desmantelado por orden de Jean IV, Duque de Bretaña, en 1395 debido a un conflicto entre este y los Penthièvres.
Durante la Guerra de la Liga, el castillo sirvió como escondite para los Hugonotes.
La puerta de entrada da a un patio externo fortificado.
La vista desde la parte superior da un buen panorama del paisaje local: "una extensa, fértil y muy poblada meseta es cruzada por valles anchos y de árboles pintorescos."