En 1574 había 60 familias judías asentadas que aportaban al tesoro real con 3000 maravedís.
[3] En el lugar donde está situado el castillo existió una primera fortificación que era propiedad de la Orden del Temple pero solo lo poseyeron hasta 1312, año en el que se disolvió la Orden y pasó a ser de la Orden de Santiago a mediados del siglo XIV.
La parte de más empaque por volumen y estructura es la parte delantera de la iglesia, lo que cubre el presbiterio, que tiene planta hexagonal donde se han conjuntado los aspectos religiosos y militares si bien, respecto al aspecto religioso resulta inusual tener como capilla y altar mayor lo que fue la torre del homenaje de una fortaleza.
Como parece ser que bajo esta fortificación hubo una Ribat, debía haber una mezquita como era preceptivo.
[5] Cuando en la segunda mitad del siglo XV pasó a pertenecer esta zona al Condado de Nieva se llevaron a cabo gran cantidad de modificaciones y nuevas construcciones.
Bajo ella está el retablo mayor que es de principios del siglo XVIII.