Se trata de uno de los castros más conocidos y mejor conservados de Galicia, debido en gran parte a que desde el año 1983 cuenta con un museo monográfico in situ.
Ocupa una extensión aproximada de 4 hectáreas intramuros, de las que 10 000 m² corresponden a la croa (parte más alta del castro) de forma cuadrangular irregular con ángulos redondeados.
Predominan los materiales de época romana avanzada o tardorromana.
Entre 1972 y 1975 las excavaciones estuvieron a cargo de Manuel Chamoso Lamas.
En las cuatro campañas se exhumaron la mayoría de las construcciones de la croa, de gran diversidad tipológica, y se hicieron sondeos en otros puntos del yacimiento (antecroas y sistemas defensivos).