Catalina de Hungría (1370-1378)

El nacimiento de Catalina era muy esperado, ya que sus padres no habían tenido hijos durante diecisiete años.

Su nacimiento también aseguraba la sucesión a la Corona de Hungría, y Catalina fue la heredera presunta durante toda su vida.

Su matrimonio estaba dirigido a mantener los lazos entre las dos casas reales.

Su padre también planeaba abandonar su reclamación a la Corona de Nápoles y al condado de Provenza, que durante aquella época estaban gobernados por su prima Juana I.

[1]​ Sin embargo, Catalina murió con tan solo ocho años, antes que su padre y su prima Juana.