El inicio de su construcción data de la primera mitad del siglo XII, y se prolongó hasta principios del siglo XIII.
Cerca del 1772 se construyó una nueva portada en sustitución de la románica original.
Cerca del 1736, el arquitecto italiano Nicolau Nasoni añadió un bello nártex barroco a la fachada lateral de la catedral.
El altar mayor, construido entre 1727 y 1729, es una importante obra del barroco joanino, proyectado por Santos Pacheco y esculpido por Miguel Francisco da Silva.
Uno de ellos, en el coro-alto, marca en Portugal un periodo que da inicio al desarrollo organístico.