En marzo de 1911 se incorporó a las fuerzas maderistas del general Modesto Rangel.
En ese mismo año fue ascendido a coronel en Cuernavaca, Morelos.
En 1920, como tantos otros zapatistas, ingresó al Ejército Nacional.
Se retiró en 1924 para trabajar en su parcela de tierra llamada «La Alameda» en su pueblo junto con su esposa Rosa Sanchéz Tinoco e hijos (Reyna, Margarita y Antonio).
Murió asesinado por Ricardo Aguilar el 24 de julio de 1938 y su muerte quedó impune.