[2] La idea del cementerio era que allí se pudiera dar sepultura a cualquier ciudadano, sin importar su ideología política o religiosa, por esto se le llamó "Cementerio Libre".
En la actualidad el cementerio es el principal atractivo turístico del municipio, debido a la belleza de su arquitectura republicana y su entorno natural.
Sin embargo, el párroco Manuel Antonio Pinzón no permitió que los restos de Zuluaga fueran llevados al camposanto, debido a la profesión que el difunto llevaba a cabo en vida.
Botero fue encarcelado por adelantar obras civiles sin permiso legal.
[4] En la década de 1950, a raíz de la guerra bipartidista que azotó a Colombia, el cementerio fue saqueado y destruido, siendo derribados monumentos, muros y rejas.