Anteriormente al actual conjunto industrial, existió una pequeña “fábrica de electricidad”, la primitiva Central Tejo, a la que popularmente se le llamó Central da Junqueira por estar junto a la calle de la Junqueira, del cual no persiste nada.
Fue un edificio construido en 1909, basada en la proyecto ingeniero de Lucien Neu y ejecutado por la firma Vieillard & Touzet, con una estética claramente modernista y una decoración localizada, principalmente, en sus fachadas norte-sur, a la cual se le adosaban tres naves industriales por el costado occidental que alojaban las calderas.
Tenían una estructura de tres calles separadas por pilastras, pequeños frisos dentados recorriéndola horizontalmente y un gran frontón quebrado que la culminaba.
En el alfiz del arco de medio punto, grabado sobre azulejo, se podía apreciar la leyenda: “1909 / Cªs Reunidas Gaz e Electricidade / Estação Eléctrica Central Tejo”.
Todos los vanos están protegidos por una moldura realizada en ladrillo y tienen un remate de arco rebajado.
Estéticamente, la fachada sigue los modelos de un palacio del renacimiento o, lo que es lo mismo: basa, pilastra y entablamento.
El cuerpo principal está organizado a base de grandes ventanales verticales con arcos de medio punto, llave central y moldura corrida por toda la fachada; entre ellos, se encuentran grandes pilastras que abrazan toda la fachada, desde el basamento hasta el entablamento, atravesando los tres cuerpos.