Vélez-Málaga es un núcleo urbano que se localiza en una zona muy próxima a la costa malagueña, asentándose sobre una zona en promontorio que le confiere un alto valor paisajístico al quedar rodeada por las estribaciones de la Sierra de Tejeda.
Este privilegiado asentamiento, junto a la disponibilidad de agua y tierras aptas para el cultivo, le concedieron una importancia histórica notable.
Vélez-Málaga tiene un origen romano/tardorromano justificado por la despoblación que se produjo desde las costas hacia el interior, pero fue en época islámica cuando se constituyó realmente como núcleo urbano con nombre de origen árabe: Ballax, Ballix, Aballix o Ballix-Malica.
La ciudad musulmana se estructuraba con la Fortaleza en el punto más alto de la población, de gran valor defensivo y estratégico, extendiéndose en la falda occidental del monte, en lo que hoy se conoce con el nombre de "La Villa", que conserva en su trazado urbanístico la huella de esta cultura; y en la falda sur el primer barrio extramuros, que se extiende hasta el cauce del arroyo que circundaba el cerro, el "Arrabal de San Sebastián".
La ciudad quedaba ceñida por un cinturón de muralla que la rodeaba, englobando la fortaleza, y contaba con cuatro puertas principales conectadas con las distintas vías de comunicación con la ciudad: la puerta de Granada al norte, la de Antequera al noroeste, la del Arrabal al sur, y la Puerta Real al oeste; siendo esta última la única que se mantiene completa en la actualidad.