Declarada como extinguida oficialmente[1] hacia el año 2000,[2][3] en 2008 se consideraba que solo quedaban algunos ejemplares asilvestrados viviendo en total libertad[4] pero en el proceso de recuperación en 2011 se hallaron varios ejemplares puros domésticos.
[3] Aunque se considera recuperada,[3] todavía no está reconocida oficialmente como especie en peligro de extinción.
[5] Se trata de la única estirpe de cerdo ibérico rubio que queda en España, pues el cano campiñés también está considerado extinto,[nota 1] quedando solo otros cerdos ibéricos rubios en Portugal, de la estirpe ruiva ervideira, perteneciente a la raza alentejana.
[7] Los ejemplares fueron adquiridos por una empresa privada, que comenzó su cría y posterior comercialización.
[3] Su inclusión en el mercado como producto ibérico, ecológico y de autor[3] tuvo especial acogida en el continente asiático.