Animal bastante rústico, adaptado a las condiciones de las islas.
Presenta papada, abundantes arrugas en la cabeza y orejas muy largas que pueden llegar hasta el extremo del hocico.
La piel es coriácea y escamosa, con arrugas repartidas por todo el cuerpo.
De tamaño medio a los 12-18 meses (edad del sacrificio) alcanzan los 130-160 kg.
En esta isla se salvó un núcleo de población del que descienden todos los animales actuales.