La seta de este hongo es comestible, cocinada.
En ejemplares jóvenes, el sombrero tiene forma casi esférica, dando a la seta un aspecto de maza; más tarde el sombrero se extiende, adquiriendo una forma aplanada.
Aunque mantiene un mamelón central, a menudo no es apreciable por las numerosas escamas.
El pie es liso y de color claro, oscureciéndose en ejemplares viejos.
Posee anillo, blanco, a menudo suelto y fácil de desplazar.