La mayoría de los correos electrónicos son actualmente transmitidos sin ningún cifrado que los proteja.
[1] El cifrado de correo electrónico ha sido usado por periodistas y usuarios regulares para proteger su privacidad.
En otras palabras, el cifrado toma lugar entre relevos individuals SMTP, no entre el origen del correo electrónico y el receptor.
Cuando ambas partes soportan STARTTLS, puede ser usado sin importar si el contenido del correo electrónico viene cifrado usando algún otro protocolo.
[3] La demostración "Signed and Encrypted Email Over The Internet" ha mostrado que las organizaciones pueden colaborar efectivamente utilizando correos electrónicos seguros.