Esta área tuvo varios nombres: se la conoció primero como «Rancho de Castro», luego como «Villa Liniers» y finalmente «Ciudadela».
Durante las Invasiones Inglesas a Buenos Aires, Santiago de Liniers reclutó hombres, caballos y otros recursos en la zona; por este motivo se habría homenajeado al héroe militar de aquel entonces poniéndole su nombre al lugar.
Estos cuarteles, los más importantes del país en su momento, tenían grandes paredones rojos y almenas del mismo color a modo de defensa y fortificadores; este aspecto exterior de pequeña ciudad amurallada habría sido el que llevó a denominar Ciudadela a la zona.
El paraje tenía alguna importancia por la presencia de una posta en el mismo sitio donde está la estación.
En 1902 se instalan los cuarteles militares, los cuales dan un mayor ímpetu a la joven población.
La empresa comenzó la venta el día 11 de noviembre y tuvo un rápido éxito.
Fue la tercera vez en la que se tiene registro de una nevada en la localidad, las anteriores veces fueron en los años 1912 y 1918.