Claire Bauroff

[3]​ Como modelo, se conservan una extensa galería de retratos fotográficos realizados por autores como Nini y Carry Hess, Alexander Binder (1925), Lotte Jacobi (c. 1928)[4]​ o, especialmente, el estadounidense nacido en Austria Trude Fleischmann (1924), en los que el cuerpo desnudo de la bailarina se fusiona con un fondo negro, poco impresionada por la cámara, considerados en la actualidad como auténticos iconos de la fotografía erótica europea del primer tercio del siglo XX.

[5]​[6]​ Se conocen también en este aspecto una carpeta compuesta por veinte litografías del artista gráfico y pintor Otto Heinrich Strohmeyer, inspiradas en sus ballets Hermes y Spatzanz (presentada en 1919),[7]​ una serie de dibujos del ilustrador vienés B. F. Dolbin, etc.

[13]​ Ese mismo año, escribió junto al cineasta húngaro Pál Fejös el guion de la película muda Pán, en la que aparecía también como actriz.

[19]​ Participó en el documental Wege zu Kraft und Schönheit – Ein Film über moderne Körperkultur (El camino de la fuerza y la belleza – Una película sobre la cultura corporal moderna),[20]​ dirigido por Nicholas Kaufmann y Wilhelm Prager y estrenado en Finlandia en octubre de 1925, considerado, entre otras cuestiones, como una defensa a ultranza del nudismo, cuya breve aparición junto a personalidades de la época como el actor y deportista Johnny Weissmüller, la actriz y bailarina austroalemana conocida artísticamente como La Jana, el empresario John D. Rockefeller, el boxeador Jack Dempsey o hasta el propio Benito Mussolini (cuya participación también se desechó)[21]​ fue prohibida por la censura.

[23]​ Desde 1927, mantuvo una relación sentimental (no está claro que llegasen a contraer matrimonio) con el historiador y filósofo judío, íntimo amigo de Broch, Paul Schrecker (1889-1963),[24]​ quien, tras la llegada del régimen nazi y su consiguiente expulsión de la Academia Prusiana de las Ciencias, huyó a París en 1933.

Claire Bauroff interpretando una de las Consolaciones de Franz Liszt . Fotografía realizada por Alexander Binder en 1925.