La prioridad para la armada consistía en proteger la extensa línea de costa tailandesa, y los cañoneros costeros se veían como la mejor opción para ello.
Los "acorazados" resultantes (pues se refería a ellos en estos términos en el Siam de la época), desplazaban 2,265 toneladas, presentaban blindaje reforzado (protegiendo maquinaria y torretas), y eran propulsados por motores diesel gemelos producidos por MAN SE en Alemania.
El armamento consistía en cuatro piezas de 8 pulgadas (203 mm)/calibre 50 montadas por parejas en dos torretas.
Los cañones japoneses rallados de 8 pulgadas eran del mismo tipo que los montados en los cruceros pesados y los portaaviones Akagi y Kaga de la Armada Imperial Japonesa.
Una torre sobre el puente albergaba a un director de tiro para apuntar los cañones principales.