Un año más tarde, en 1882, los jesuitas obtuvieron los terrenos del antiguo monasterio de Belén regentado por las monjas bernardas que se encontraba frente a la plaza del Colegio de Santa Cruz.
Para no interrumpir la enseñanza se impartieron clases distribuidas por algunos pisos y chalés dentro de Valladolid.
En 1936 se abrieron de nuevo las aulas del Colegio, conviviendo con los militares que habían ocupado algunas dependencias.
El edificio, inscrito en un rectángulo, se articula alrededor de dos patios.
Su fachada principal (la que da a la plaza del Colegio de Santa Cruz) se divide en dos cuerpos y las tres restantes en tres cuerpos, aunque la altura final sea la misma en todo el edificio.
Se utilizaron como materiales de construcción el ladrillo y la piedra.
Sobre la puerta principal que se abre en arco de medio punto hay un balcón muy amplio, con frontón y barandilla de piedra que a su vez está flanqueado por pilastras acanaladas.
Los muros laterales se decoraron con pinturas al óleo, con pasajes de la Sagrada Familia.
Junto a las actuaciones propias del colegio, el coro y orquesta también acude a las distintos llamamientos e invitaciones que desde diferentes organismos y organizaciones le solicitan.
[5] El Colegio San José tiene numerosos títulos en fútbol, baloncesto y voleibol.
Los rivales tradicionales locales son los colegios de Nuestra Señora del Lourdes, La Salle y La Inmaculada (maristas).
A lo largo del año la asociación convoca tres reuniones generales: En la Asamblea General Anual se nombra un "Antiguo Alumno Distinguido", aquel cuyos méritos y cuya trayectoria personal y humana le haga merecedor de esta designación.