No el amarillo que se obtiene al mezclar luz roja con luz verde, o el tono verde intermedio entre el amarillo y el azul en el espectro visible, sino a colores supuestamente únicos, completamente «nuevos».
A diferencia de los equipos usados en pruebas más simples, el artefacto tenía la habilidad para seguir los movimientos involuntarios del ojo, y ajustar sus espejos de manera que la imagen parecía estar perfectamente estable para cada ojo.
En 1927, el escritor estadounidense H. P. Lovecraft escribió un cuento llamado «El color que cayó del cielo» donde un meteorito impacta en la granja de una familia en Nueva Inglaterra.
Octarino es el octavo color imaginario de Terry Pratchett, descrito como un «púrpura amarillo verdoso».
[3] Un bulo o una grabación burlesca por Negativland, incluyen al personaje ficticio Crosley Bendix, afirmando que ha encontrado algo nuevo, «el cuarto color primario», llamado «squant».