En muchos casos, la conductividad está directamente vinculada a la cantidad de sólidos totales disueltos (TDS).
La conductividad se determina habitualmente midiendo la resistencia AC de una solución entre dos electrodos.
A menudo, en la industria se utiliza la tradicional unidad de μS/cm.
A veces, en la literatura científica y técnica se encuentra expresada en ohm-1.cm-1 , ya que 1 S equivale a un ohmio inverso por lo que también, más raramente, la conductividad de las disoluciones, puede aparecer como 1 mho/m = 1 S/m donde mho es el recíproco de ohmio.
La célula estándar comúnmente utilizada tiene un ancho de 1 cm, y así, para agua muy pura en equilibrio con el aire podría tener una resistencia de aproximadamente 106 ohm, conocido como Megaohmio.
El agua ultra pura podría alcanzar 10 megaohms o más.
A veces, una conductividad se da sólo en "microSiemens" (omitiendo el término de distancia en la unidad).
La conductividad eléctrica de un electrolito en disolución dese establece determinando la resistencia de la solución entre dos electrodos planos o cilíndricos separados por una distancia fija.
[6] Muchos sistemas comerciales ofrecen corrección automática de temperatura.
Los electrolitos fuertes son capaces de disociarse completamente en solución.
se conoce como la conductividad molar límite, es decir, "en el límite de la dilución infinita" , K es una constante empírica y c es la concentración de electrolito, como ya se ha indicado.
Así, el electrolito se trata como si fuera un ácido débil y se puede obtener una constante, K, para el equilibrio: Davies describe los resultados de tales cálculos con gran detalle, pero afirma que K no necesariamente debe ser considerada como una verdadera constante de equilibrio, sino más bien, que la inclusión del término asociación de iones es útil para extender el rango de buena concordancia entre los datos de conductividad teóricos y experimentales.
[9] Se han hecho varios intentos para extender el tratamiento de Onsager a soluciones más concentradas.
[10] La existencia del llamado mínimo de conductancia ha demostrado ser un tema controvertido en lo que respecta a la interpretación.
Los detectores de conductividad se utilizan habitualmente en la cromatografía iónica.