Confesión de Pedro

[4]​ En este episodio Jesús también selecciona a Pedro como el líder de los Apóstoles, y afirma: «sobre esta roca edificaré mi iglesia».

[1]​[11]​ Solamente en Mateo 16:17 Jesús bendice a Pedro por su respuesta, y más tarde indica que esta revelación es la roca fundacional de la Iglesia.

Esto comienza con: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.En la bendición de Pedro, Jesús no solamente acepta los títulos de Cristo e Hijo de Dios que Pedro le atribuye, sino que declara a la proclamación una revelación divina al afirmar que su Padre en el Cielo había revelado a Pedro.

[4]​ En esta afirmación, al apoyar los dos títulos como revelación divina, Jesús inequívocamente se declara a sí mismo como Cristo e Hijo de Dios.

[3]​ Las «puertas del infierno» (o Hades) se refiere al mundo inferior, y la morada de los muertos, y proclama que los poderes que se oponen a Dios no serían capaces de triunfar sobre la iglesia.

Como se discute más adelante, varias denominaciones cristianas han asignado diferentes interpretaciones a la autoridad concedida en este pasaje.

La declaración «y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella» es tomada por lo general en el sentido de que la Iglesia nunca se extinguirá.

Las iglesias ortodoxas orientales y la ortodoxia oriental también rechazan la sucesión de los papas y ven las palabras de Jesús, «todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos», como otorgando primero a Pedro lo que fue concedido más tarde a todos los apóstoles en forma colectiva.

[5]​ Las reuniones ecuménicas entre las diferentes denominaciones han tenido lugar en relación con estas interpretaciones, pero ningún acuerdo final ha surgido.

Vidriera de la confesión de Pedro en Lucas 9:20 : « ¿Y vosotros, quién decís que soy? Entonces respondiendo Pedro, dijo: El Cristo de Dios ». [ 1 ]
Representación de Pietro Perugino de Pedro recibiendo las llaves del Reino de los Cielos por Jesús, 1492.
Placa en la Catedral de Nantes : «Tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia».