Su juventud estuvo marcada por la Segunda Guerra Mundial y la carnicería donde trabajaba su padre.
En 1959, su madre murió, y ese mismo año comenzó filosofía y teología en la Universidad de Lovaina.
En 1967 fue puesto en prisión durante seis días y torturado, más tarde por razones de seguridad, se trasladó a Francia, y más tarde volvería a Brasil donde fue encarcelado dos años.
En 1980 fue indultado por el gobierno brasileño, y luego regresó a Francia en 1982.
A partir de 1984, empezó a mostrar los primeros signos de SIDA, falleciendo años después.