Galán era de ascendencia española y contó como subalternos a Basilio Campillo, a David Cózar y a Eduardo de Loyo.
Operó en Córdoba, Huatusco, Paso de Ovejas y Manga de Clavo y Omealca, Veracruz.
Se incorporó a la Revolución Mexicana a finales de 1910, pero nuevamente se sublevó en Morelos al ser llevado por Gaudencio de la Llave con los sucesos de la Decena Trágica.
Regresó a su estado acompañado del coronel Rocha, reconociendo el Plan de Ayala.
Sus restos mortales descansan en la Ciudad de Cuitlahuac, Ver.