El Convento de San Diego, también conocido como Recoleta de San Diego, es un complejo religioso franciscano[1] que consiste de convento, iglesia y museo.
Está ubicado a las afueras del centro histórico de Quito, junto al cementerio del mismo nombre.
Esteban Marañón), el vicario general del obispado de Quito (Lic.
[3] El sitio de construcción original habría sido en el sector de "Añaquito"[3] El 15 de julio de 1599 fue aprobada una petición presentada por el fray Bartolomé Rubio para trasladar la recoleta desde Añaquito a su sitio actual al pie del Pichincha, a un lugar que por entonces tenía el nombre de "Miraflores".
La actual Avenida 24 de Mayo era en ese tiempo una quebrada llamada de los Gallinazos (luego de Jerusalén),[6] y actuaba como una barrera natural que aislaba la Recoleta del Quito de entonces.