Las Coplas de Mingo Revulgo (siglo XV) son treinta y dos novenas satíricas glosadas por Hernando del Pulgar.
En ellas, el pastor Gil Arribato (arri- de ariolor, en latín y -bato de vaticinor, adivinar y profetizar), que representa a un adivino o profeta, le pregunta a otro pastor, Mingo Revulgo, que representa al pueblo, qué le pasa.
Revulgo le relata sus infortunios, muestra como se han debilitado las cuatro virtudes cardinales principales, la Justicia, la Fortaleza, la Prudencia y la Temperancia, representadas por cuatro perras guardianas del ganado y que por esta causa los lobos están dañándolo.
Arribato contesta que no se le pueden atribuir todas las penurias al pastor, que representa al rey Enrique IV de Castilla, sino que parte le corresponde al pueblo, que ha perdido las tres virtudes teologales, la Fe, la Esperanza y la Caridad.
Por último, alaba la vida mediana, pues «es menos dañoso / pacentar velando por lo costero, / que lo alto y hondonero / juro a mí que es peligroso».