Entre los niños se cimentó una férrea amistad que perduraría durante muchos años.
Al igual que sus compañeros, pronto empezó a trabajar en pequeños papeles en el cine, generalmente como extra o especialista cinematográfico.
Fue precisamente Ng quien le dio a Yuen la oportunidad de dirigir su primera película, Ninja in the Dragon's Den (1982) con Hiroyuki Sanada y Conan Lee.
Tras los buenos resultados en taquilla de Ultra Force 2 (1985) con Michelle Yeoh y Cynthia Rothrock, Ng le pidió a Yuen que dirigiera su primer proyecto internacional, Retroceder Nunca Rendirse Jamás (1986), que lanzó a Jean-Claude Van Damme.
Esta satisfactoria experiencia se repitió más adelante en una serie taquilleros filmes como Lethal Weapon 4, Romeo debe morir, X-Men, Transporter, El monje y Blood: The Last Vampire.