La raza corriedale es la más antigua de todas las razas mestizas, surgió del cruce de la raza merina y lincoln,[1] desarrollada en simultáneo en Australia y Nueva Zelanda, fue llevada a Estados Unidos en el año 1914.
Tienen una larga vida útil, es un animal robusto y equilibrado en todo su cuerpo, son madres dóciles, fácil de cuidar, con altas tasas de fecundidad.
Se adaptan bien a una amplia gama de condiciones climáticas, no tienen cuernos.
Las corriedales producen un espeso vellón, voluminoso, que es popular entre los hilanderos y puede ser utilizado para una gama de prendas de vestir hiladas a mano.
Su lana densa es media fina y de alto rendimiento, con buena longitud y suavidad, entre medio tiene algo de lana larga.