[1] En el marco de la inmigración subsahariana hacía Europa, una de las barcazas que transportaba cerca de 500 migrantes se hundió frente a las costas de la isla italiana de Lampedusa, rescatándose 155 supervivientes y muriendo una cifra cercana a los 360.
Este hecho causó gran conmoción en la sociedad italiana, decretándose un día de luto nacional, e hizo que el carpintero Francesco Tuccio, realizase esta cruz con maderas del naufragio para honrar y recordar a los fallecidos.
[2] En abril del 2014, la fundación italiana Casa del Espíritu Santo y las Artes de Milán le mostró la cruz al Papa Francisco.
Francisco la bendijo y les pidió a los enviados de la fundación que se encargase de que la cruz recorriese el mundo.
[3] Mide 2,80 de alto, 1,50 de alto y pesa 60 kilos.