Se desarrolló una versión refinada para el Servicio Aéreo del Ejército de los Estados Unidos bajo la designación R-6.
Estos dos últimos aviones presentaban componentes aerodinámicos refinados, incluyendo radiadores montados en superficie.
El año siguiente, este avión fue modificado y redesignado CR-2, y estuvo acompañado en la carrera Pulitzer por un segundo avión construido al nuevo estándar, más dos R-6 volados por pilotos del Ejército.
Estos Curtiss quedaron del primer al cuarto puestos, los dos R-6 seguidos por los dos CR-2.
En 1923, los CR-2 fueron equipados con flotadores para la carrera del Trofeo Schneider y se redesignaron CR-3.