Las celebraciones incluyen conferencias, talleres y ceremonias de premiación que destacan la labor periodística y su papel esencial en la promoción de la paz y la democracia a través de la visibilidad de temas críticos como el cambio climático y la corrupción.
También sirve para denunciar las restricciones a la prensa y promover un diálogo constructivo entre medios y gobernantes.
Este premio, otorgado anualmente desde 1997, reconoce a individuos, organizaciones o instituciones que han hecho contribuciones significativas a la defensa y promoción de la libertad de prensa, especialmente bajo circunstancias de riesgo.
El premio lleva el nombre de Guillermo Cano Isaza, un periodista colombiano asesinado por su labor periodística, y es entregado por el director general de la UNESCO cada 3 de mayo, subrayando el compromiso continuo con la protección de la prensa libre.
La organización promueve recomendaciones para la protección del periodismo y participa en la Conferencia Global del Día Mundial de la Libertad de Prensa[39] organizada por la UNESCO, abordando amenazas a la libertad de prensa en Europa.