Dangerous Curves (en España: Curvas peligrosas) es una película estadounidense de 1929,[1] de la época pre-code, dirigida por Lothar Mendes y protagonizada por Clara Bow y Richard Arlen.
Un día Pat explica a Larry el doble juego de Zara y como resultado éste se lesiona al caer del cable, lo que le lleva a la bebida.
Pat le persuade de volver al circo y para reforzar su confianza, trabaja con él en un número cómico.
Mientras tanto Zara y Tony se han casado secretamente pero no logran ser contratados juntos y Zara se reincorpora como compañera de Larry en el número de la cuerda floja.
Más tarde Larry se entera de que Zara se ha casado por lo que vuelve a la bebida y Pat se ve obligada a maquinar un plan para salvar el futuro de Larry, aunque le acaba costando el trabajo.