El verano de 1988, cuando pertenecía al equipo Júnior A del Ajax, Johan Cruyff le fichó para el FC Barcelona.
[2] Tras realizar la pretemporada 1988/89 con el primer equipo azulgrana, pasó a jugar en el Barcelona Atlètic, en Segunda División.
Su inclusión en el equipo fue cuestionada por el técnico del filial, Lluís Pujol, quien posteriormente afirmó que su alineación le fue impuesta por Cruyff, en detrimento de otros jugadores locales.
El descenso a Segunda División B le impidió seguir en el filial otra temporada, al estar prohibida la participación de extranjeros en esa categoría.
Una lesión crónica en el tendón de aquiles lastró su carrera, especialmente en su recta final, en la que apenas pudo jugar.