[2] El agutí es básicamente diurno, pero si hay actividad humana cerca, no deja la protección que le brinda su madriguera, hasta el oscurecer.
Usualmente se sienta para comer y sostiene el alimento con sus patas delanteras.
Acostumbran vivir en parejas, son monógamos, y ambos padres protegen a las crías.
La separación entre los padres y las crías está asociada con la llegada de un nuevo pequeño.
En muchos lugares ha declinado la población de agutíes, debido a que son cazados para su consumo.