En París conoció a Robert Capa, Gerda Taro y Henri Cartier-Bresson.
De ideas antifascistas, viajó en 1936 a España y fotografió la Guerra Civil.
Luego se estableció en Nueva York y trabajó para el ejército de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial como fotógrafo e intérprete hasta 1945.
[3] Terminada la guerra, documentó para la Unesco los efectos de la guerra en los niños en diferentes países (Checoslovaquia, Polonia, Alemania, Grecia e Italia).
En 1947, junto con Capa, Henri Cartier-Bresson y George Rodger, fundó la Agencia Magnum de fotografía.