Ferrari nació en Chivasso, cerca de Turín.
Después de estudiar en el taller de Giovanni Martino Spanzotti, se hizo famoso por sus altares y polípticos, decorados en un estilo inspirado en los maestros del norte de Europa.
Distinguir la contribución de cada uno en estas obras es un problema que no está completamente resuelto.
En obras posteriores, como en el Tríptico de la Sacra di San Michele (1507) o en la Natividad de Avigliana (1511), se manifiesta ya con un estilo propio, en el que da muestras a la vez de gusto gotizante, vigorosos aún en la tierra de Piamonte.
Merecen ser recordadas también las dos tablas que representan a la Virgen y el Niño con santos en la sacristía de la catedral de Ivrea.