[1][2][3] torturado y fusilado, por negarse a abandonar la fe, conocido por su nombre de bautizo latinizado, Lázaro.
El capitán holandés y comandante Eustachius De Lannoy, lo instruyó en la fe católica.
Fue casado, y bautizado adulto, después de solicitarlo insistentemente, tomando el nombre de Lázaro que al igual que su nombre original, significa Dios es mi auxilio.
Unos soldados lo ejecutaron, le dispararon, y sus restos fueros arrojados descuidadamente.
Es considerado como mártir de la Iglesia católica[5] y fue declarado beato en 2012 por el Papa Benedicto XVI.