Diócesis de Ascoli Piceno

Según la tradición, la diócesis de Ascoli se remonta al siglo IV y su fundación está ligada a la vida y a la memoria del santo protoobispo Emigdio, mártir durante el imperio de Diocleciano y patrono de la diócesis.

[nota 2]​ El primer obispo conocido de Asculum es Lucenzio que formó parte del grupo de prelados enviados a Constantinopla y que, como legados papales, representó al papa León I en el Concilio de Calcedonia en 451.

La serie episcopal se vuelve más continua y segura a partir de la segunda mitad del siglo X.

Durante el siglo XIII también llegaron a la diócesis los franciscanos, dominicos y agustinos.

Camaiani (1566-1579) fue el primero que se comprometió activamente en la aplicación de los decretos de reforma tridentina: convocó una visita pastoral a la diócesis (1567), organizó un sínodo diocesano (1568) y fundó el seminario episcopal (1571).

[3]​ Entre los obispos posteriores de Ascoli se recuerda a Giovanni Andrea Archetti, que prefirió el exilio antes que firmar el juramento al gobierno republicano francés; Carlo Belgrado, que en 1857 acogió la visita del papa Pío IX a Ascoli; y Ambrogio Squintani, que logró obtener de los alemanes y de las fuerzas aliadas, durante la Segunda Guerra Mundial, que Ascoli fuera declarada "ciudad abierta", salvándola así de desastrosos bombardeos.

Palacio episcopal de Ascoli Piceno